Jhonda Guiitarr Zucarh, mensaje enviado a mi Facebook
¿Alguien tiene algún traductor Creyente Fanático / Humano?
No le entiendo ni papa.
Venga, voy a hacer un esfuerzo.
La historia de Jesús resucitado es cierta pues así lo pone en la biblia. Dios existe pues lo dice la biblia. Como la biblia la escribió Dios la biblia es cierta, luego la historia de Jesús resucitado es cierta,…. Me estoy mareando de dar tantas vueltas en círculos.
Algunos de estos tipos me recuerdan a los burros con orejeras dando vueltas en la noria.
Vamos a ver la segunda tontería de este iluminado. Se refiere a lo siguiente (no os lo perdáis, es un chiste de principio a fin):
Y ante esto yo me pregunto: ¿Tan débil es ese Dios y esa religión que necesitan inventar MENTIRAS tan absurdas e infantiles para defenderlo?
Desde luego, a la pobre gente que no tiene ni la más mínima cultura la engañan, tal y como han engañado al amigo Jhonda Guiitarr Zucarh
¿Alguien con una cultura media/baja cree que hay que rebatir esta estupidez?
En fin, veamos unos pocos hechos, aunque os confieso que me da muchísima pereza. Es como tener que debatir si un cuadrado tiene 80 lados.
Harold Hill fue una persona real y presidente de Curtis Engines en Baltimore, Maryland.
Fue popular como predicador entre grupos cristianos por ser un hombre de negocios exitoso, porque dijo ser consultor de la NASA y porque dio conferencias sobre la Biblia y la ciencia.
Una de sus más populares conferencias era la historia del Día Que Faltaba.
Parece que Harold Hill había contado la historia sin mucho alboroto hasta octubre 1969, cuando una columnista de un pequeño periódico americano escuchó sobre ella. Estuvo tan intrigada que la tomó como su tema y la publicó. El nombre de la columnista fue Mary Kathryn Bryan y su columna apareció en el Spencer Evening World in Spencer, Indiana. De acuerdo al mismo periódico, la respuesta a esta publicación era francamente increíble. Empezaron a recibir solicitudes desde todo el mundo por el permiso de reproducir el artículo, y dejaron de contarlas cuando habían superado los 1500.
Partiendo de esta publicación, la historia del Día Que Faltaba encontró su camino a números desconocidos de revistas, periódicos, tratados evangelísticos, libros y ahora correos electrónicos. Harlod Hill mismo la incluyó en un libro cristiano que escribió.
Ahora vienen los problemas:
Nadie, salvo Harold Hill puede confirmar la historia que cuenta. Durante muchos años, cada vez cuando alguien le preguntó sobre esto, Hill envió una respuesta preimpresa, diciendo que la fuente de la información se había extraviado, pero que enviaría a todos una copia una vez que la reubicara. La fuente jamás materializó, pero en su siguiente libro, Hill desechó todo escepticismo, diciendo que ninguna otra sustentación haría falta. Su actitud era que si que la gente lo creyó y esto las llevará hacia cosas espirituales, estaría justificado.
Otro problema es que la NASA negó que Harold Hill alguna vez hubiera sido entre sus consultores.
James S. Lacy, de la Oficina de Relaciones Públicas de la NASA, escribió una carta a los periodistas, explicando que el único Harold Hill en cualquiera de sus archivos era un hombre involucrado en contratos para la operación y el mantenimiento de algunas máquinas diesel. Además, de acuerdo a una carta documentada de la Oficina de la NASA en Washington, “No hay ni un grano de verdad en la historia que la NASA hubiera descubierto un día faltante en la historia de la tierra.”
En estos momentos los conspiranoicos de siempre dirán lo de siempre: “la NASA miente”. Es curioso pues los blog donde publican esta estupidez dan credibilidad a la NASA. En cualquier caso, la NASA está llena de cristianos que seguro estarían deseando confirmar esta historia, cosa que nunca han hecho.
Por la parte técnica, lo que dicen no tiene sentido. En primer lugar las orbitas de los satélites no se calculan a cientos de años, mucho menos a miles. Se puede hacer como simulación, pero no para aplicar a satélites reales, cuya vida media se mide en unos pocos años.
Actualmente se hacen muchísimas simulaciones de trayectorias de objetos naturales (satélites naturales, planetas, asteroides,...) algunas veces en periodos de millones de años y nunca (obviamente) se observó nada ni remotamente parecido a lo dicho.
En segundo lugar, el programa de simulación. Cualquiera que tenga unas nociones mínimas de programación sabe que los programas no son más que una serie de instrucciones programadas por alguien. Lo que dicen de que la computadora se detuvo simulando orbitas futuras es una absoluta memez. Es como decir que un reloj se para porque el reloj descubre (no sé cómo) que le falta un día.
¿Por cierto, que significa faltar un día?
A siiii, "Y el sol se detuvo y la luna se paró... y el sol se paró en medio del cielo y no se apresuró a ponerse casi un día entero".
Y obviamente, el ordenador (o un reloj) se da cuenta de esto:
For x=2011 to 10000
Haz cálculos orbitales año tras año
If “el sol se detiene” (Josué 10:13). then “pantallazo azul de error”
Next
x-D
Además, el programa calcula orbitas futuras para satélites y descubre un día “que falta” en el pasado. Aissss, elaborad un poco mejor las mentiras que aun siendo muy graciosas, perdéis muy fácilmente la poca credibilidad que os queda incluso de entre los creyentes.
La verdad, es de las cosas más ridículas que he escuchado. Despido esta gilipollez con la última frase de la “anécdota”
Si, más cerca de la mentira y el engaño, donde siempre estuvo y sigue estando.
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